La propuesta escénica “Ahora es tarde, señoras” escrita y dirigida por Andrea Martos e interpretada por Yago Valverde, Alexia Hortal y Estíbaliz Racionero es una dolorosa mascarada.
La obra es un gran interrogante, un lamento por la pérdida, el paso del tiempo, lo que queremos o quisimos ser y no somos y nunca seremos. Eso sí, todo ello tras un vestido de lunares y a golpe de tacón y con mucha, mucha algarabía de ruidos y voces y gritos que no sirven para acallar ese terrible silencio de flores ajadas y marchitas, de oportunidades perdidas o peor, que nunca llegaron.
Ni siquiera la televisión y su nutrida parrilla de programas huecos nos alienan del todo. Podemos terminar bailando sin cabeza o con la cabeza comida por tanto concurso, telecupón, teleadivino, telebasura… pero el dolor por la pérdida va por dentro, como la procesión, como la copla sentida hondamente y olé.
Es una obra preñada de esa simbiosis dañina que en ocasiones tiene la familia o las intensas relaciones dependientes con sus esperanzas rotas y sus sueños frustrados y como nos arrastran sin ser totalmente conscientes de ello.
Los actores, Alexia Hortal, Estíbaliz Racionero y Yago Valverde, están magníficos es sus papeles y dan vida a un intenso texto que se multiplica en gestos, cambios de registro, entradas y salidas de escena, intervenciones desgarradoras y cómicas a un tiempo.
La copla, la risa, los gritos, las estridencias tratan, a duras penas, como un mal maquillaje, de tapar o al menos entretener, la soledad y el fracaso compartido. Ni la televisión, la mala televisión, la de garrafón, puede ahogar el grito interior.
Parecieran tres seres encapsulados en el tiempo, anhelantes de fama y popularidad pero sin esperanza, dentro de una caja de televisión, ahogados por la incapacidad de desarrollarse pero que por momentos toman forma tras la pantalla y se recrean en personajes de la ficción televisiva. Tal vez para ser así felices en ese instante…
El texto de Andrea Martos es magnífico, hilarante en algunos momentos, muy rico en giros y cambios de registro, que da juego a gestualidades y a una intensidad dramática y cómica que se articulan de una manera muy singular y creativa dejando tras una risa espontánea una mueca de cierta incredulidad y pena por esos seres que sueñan despiertos con un alma prestada proveniente del otro lado de la pantalla.
Mas info: Sala Azarte
‘Ahora es tarde señoras’ se puede ver en la Sala Azarte de Madrid (C/ San Marcos, 19) , el 16 de septiembre a las 20hs, 23 de septiembre a las 20hs, 30 de septiembre a las 20hs.
Javier Torres.