Tras la retirada de Hayao Miyazaki de la animación, los japoneses se han quedado huérfanos del que fue en día padre y precursor de su gran fama. Por ello, parece que más de uno ha intentado buscarle un heredero, y entre ellos está Hosoda, quien está consiguiendo relevancia gracias a su primera película totalmente bajo su mando: ‘El niño y la bestia’.
El último trabajo de Hosoda luce de fábula sobre todo en el apartado visual. Los escenarios y los movimientos de personajes durante los primeros episodios son más naturales que nunca en la filmografía del cineasta japonés. Además, esa mejora visual también se corresponde en la animación, que ayuda a establecer unas cotas altísimas dentro de lo que representa la puesta en escena.
Sin embargo, ‘El Niño y la Bestia’ no destaca tanto en el apartado de guion. Por un lado, hay un trabajo totalmente perfilado, con una estructura lógica hilada con mucho ciudado. Por el otro lado, la historia es algo predecible, lo cual no es mala señal (hasta las películas más flojas de Hayao Miyazaki lo han sido), pero sí resta calidad a la película el hecho de que el guion sí sea caótico durante la segunda mitad de la historia. Ese error, que se repite en lo general en la filmografía de Mamoru Hosoda, provoca una falta de punch emocional.
A pesar de todo, el último trabajo de Hosoda sigue siendo, como el resto de su filmografía, un trabajo sólido donde la belleza formal es su gran baza. Sin embargo, esta pregunta quedará incrustada en la cabeza de más de uno de los fans del director nipón: ¿Qué clase de maravilla hará Hosoda cuando sus guiones sean tan buenos como su puesta en escena?.
‘El niño y la bestia’ se esttrena el 22.4.16.
Carlos Martínez.