En un paisaje apocalíptico la palabra escrita cambia el destino de un hombre

Estamos en medio de una catástrofe que ya ha sucedido. Un padre y su hijo se encuentran entre los supervivientes. La violencia impregna toda la historia desde el principio, empezando por el crudo inicio de una pelea a muerte en una playa desierta entre un niño (el hijo) y un perro hambriento y furioso. El hijo es criado como un niño salvaje, pues su padre considera que es la única forma de sobrevivir (sin abrazos, sin amor, sin afecto). No obstante, por las noches, el padre (enfermo) escribe en un diario (un diario secreto) al que no permite saber de qué trata a su hijo cuando le pregunta por él. El hijo no sabe leer, su padre nunca le enseñó.  Cuando el padre muere, el hijo decide emprender un viaje lleno de peligros a lo largo del río, en busca de alguien que pueda leer el diario que su padre escribió, a lo largo de su vida.

Sobrevivir al fin de la civilización, en una época en la que no queda más que el odio, el hambre, los escombros de una humanidad furiosa que ahuyenta los recuerdos de una época (la nuestra) en la que todavía se leía, se hablaba y se amaba. ¿Qué queda, al final del mundo de lo humano? Un cuaderno, escrito por el Padre (Paolo Pierobon) a su Hijo que no sabe leer, con la esperanza de que tenga un futuro y aprenda a amar aunque le hayan enseñado a no hacerlo, porque sólo el amor puede salvar y «hacer invencible». Lo sabe muy bien el conmovedor personaje interpretado por Valerio Mastandrea, que aparece a la hora y media de la película, y al que hubiera sido interesante explorar más. Es El Verdugo y lo conocemos en una fase delicada de su vida, en la que ya no puede perdonarse los horrores que ha cometido. Los pecados de los padres es otro de los temas principales de la película, que va más allá de la propia historia y se convierte aquí también en una metáfora de la condena generacional de quienes envenenaron el planeta, privando a la posteridad de cualquier posibilidad de un futuro habitable.

Sólo hay dos personajes femeninos: Valeria Golino es la bruja, que mantiene su humanidad y su memoria intactas tras una mirada vidriosa. Maria Roveran es María, desnuda y enjaulada, presa de todos los hombres que encuentra y, sin embargo, en la desesperación de su condición de subordinada, dotada de una luz interior «a pesar de todo» que la actriz – valiente e increíblemente expresiva – consigue restituir poderosamente.

‘La tierra de los hijos’

En la película, que es a la vez épica e intimista, obstinadamente oscura y no exenta de defectos, cabe destacar el impresionante trabajo de la banda sonora: parece que estamos con el hijo en la barca cortando el agua, viendo el crepitar de la casa de madera en llamas, moviéndose entre las jaulas de hierro oxidado de la película. La música, compuesta por Motta, enmarca las escenas con un ritmo afligido, reforzando la convicción del espectador de que éste es el destino que nos espera cada vez que dejamos de ayudarnos a nosotros mismos, de preocuparnos y querer conocer a los demás, de pensar activamente en la vida de los que vendrán después de nosotros. Cada vez, en definitiva, que dejamos de ser humanos.

Las palabras llenas de dolor escritas en el diario del padre a su hijo, salvan a este de una muerte segura. El verdugo, al leer el diario, revive en su memoria que un día fue padre y que entregó a su propio hijo a la muerte, por sobrevivir.

En definitiva, un excelente Apocalipsis de mugriento, asfixiante y negro destino, poblado de seres que han decidido no recordar lo que fueron, lo que un día tuvieron, el amor de parejas y sueños, pero que se abre a la vida con lo único que le da sentido: el Amor. De ahí su título ‘LA TIERRA DE LOS HIJOS‘, como deseo de lo que todos quisiéramos para ellos.

La película tuvo su première española en el Festival de Sitges 2021 y se presentó en el Fancine de Málaga.

‘La tierra de los hijos’ es la libre adaptación cinematográfica de la novela gráfica homónima del autor italiano Gipi, y está protagonizada por el debutante Leon de la Vallée, junto a Paolo Pierobon (“Un italiano en Noruega”) y Valeria Golino (“Rain man”).

Ficha Técnica ‘La tierra de los hijos’

Director: Claudio Cupellini.
Título original: La terra dei figli.
Año: 2021.
Producida por: Coproducción Italia-Francia; Indigo Film, RAI Cinema, Wy Productions
Género: Drama. Ciencia ficción | Futuro postapocalíptico
País: Italia.
Título en España: La tierra de los hijos.
Duración: 120 min.
Distribuida por: A CONTRACORRIENTE FILMS.
Guión: Claudio Cupellini, Guido Iuculano, Filippo Gravino.
Novela gráfica: Gian Alfonso Pacinotti.
Fotografía: Gergely Pohárnok.
Reparto: Leon De La Vallée, Paolo Pierobon, Maria Roveran, Fabrizio Ferracane, Maurizio Donadoni, Franco Ravera, Alessandro Tedeschi, Valerio Mastandrea, Valeria Golino, Pippo Delbono, Michelangelo Dalisi.

Estreno en España: 17-12-2021