Última entrega de la saga Lobezno tal y como lo hemos conocido. Cuenta con una acción trepidante y es un poquito más gore. Tanto al personaje -caracterización incluida- como al actor el Sr. Jackman se les nota el paso del tiempo. La película narra una era en que prácticamente no hay mutantes y los que quedan están para el arrastre. Lobezno (Logan) se halla oculto en una parte del desierto mexicano ganándose la vida como un miserable conductor de alquiler y en un estado de alcoholismo infame. El profesor Charles Xavier también está oculto y padeciendo ataques cada vez más frecuentes y convulsos en su poderosa mente que ya no controla.
La apatía de Logan para con su existencia llegará a su fin tras la visita de una enigmática mujer que le pide que cuide y lleve a una niña «especial» a un lugar seguro y predestinado. Por supuesto esa tarea no será un paseo triunfal y tendrá que emplearse como nunca para proteger a la niña de unos malos malísimos que parece que no tienen fin.
En resumen se trata de una película con acción a raudales que sin duda hará las delicias de los fans de la saga, aunque al final…
Miguel Ángel Ausín.