“¿Dijiste media“¿Dijiste media verdad? /
Dirán que mientes dos veces /
si dices la otra mitad”.
Antonio Machado.
Dirán que mientes dos veces /si dices la otra mitad”.Antonio Machado.
La falacia de la “media verdad” es una herramienta profusamente utilizada por los demagogos para presentar sus postulados y pretensiones como legítimos y verdaderos.
Así, cuando se afirma que la Conferencia de Venecia insta al Estado a ponerse de acuerdo con el gobierno autonómico de Cataluña para acordar un referéndum sobre la independencia, se oculta que, en realidad, la respuesta indicaba que “la Comisión Europea para la Democracia a través del Derecho pone especial énfasis en la necesidad de que cualquier referéndum se lleve a cabo en pleno cumplimiento con la Constitución Española y la legislación aplicable”. (LA VANGUARDIA, 03/06/17 – Isabel García Pagán).
Cuando se dice que se encarcela a políticos por sus ideas, se oculta que todos sus compañeros de partido tienen las mismas opiniones y, curiosamente, no se ha encarcelado a nadie por expresarlas. De este modo se pretende soslayar que son los hechos, no las ideas, las que han motivado el procesamiento de los acusados. Se juzgan sus acciones, no sus pensamientos.
Votar no es delito, por supuesto que no. Por eso no ha sido nadie encausado por depositar su voto. Otra cosa es que los promotores de un acto ilegal, declarado como tal por el propio Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y que, a pesar de conocer su ilegitimidad, se puso en marcha con innumerables irregularidades, tengan que responder por sus decisiones voluntariamente adoptadas.
Nos asiste el derecho a decidir. Es obvio que siempre que la decisión adoptada no vulnere La Ley.
Las Leyes Catalanas son soberanas. Las normas jurídicas en España, miembro de la Unión Europea, tienen rangos que es imperativo respetar. Ninguna Ley de rango inferior puede imponerse sobre otra de rango superior. En ese sentido, la jerarquía de las Normas Jurídicas de España establece que, en primer lugar, está La Constitución. La escala, por este orden, se completa con Los Tratados Internacionales, Leyes Orgánicas y Ordinarias, Decretos Legislativos y Decretos Leyes, Reglamentos del Gobierno, Leyes de las Comunidades autónomas y Reglamentos de las Comunidades Autónomas.
Es cierto, sin ningún género de duda, que tengo todo el derecho del mundo a desear la independencia de mi barrio, pueblo, ciudad, provincia, etc. Pero ese deseo no tiene una entidad jurídica ejecutiva que obligue a nadie a concederlo sin más. Un vecino puede pretender abrir una puerta en el rellano de su escalera que le permita el acceso a su piso desde la finca colindante, pero… necesita el permiso de su propia comunidad para alterar lo que es de todos, además del permiso y acuerdo tácito de la otra finca afectada.
«Somos libres, en resumen, de estar en desacuerdo con la ley, pero no de desobedecerla. Pues en un gobierno de leyes y no de hombres, ningún hombre, por muy prominente o poderoso que sea, y ninguna turba, por más rebelde o turbulenta que sea, tiene derecho a desafiar a un tribunal de justicia».
«Si este país llegara al punto en que cualquier hombre o grupo de hombres por la fuerza o la amenaza de la fuerza pudiera desafiar largamente los mandamientos de nuestra Corte y nuestra Constitución, entonces ninguna ley estaría libre de duda, ningún juez estaría seguro de su mandato y ningún ciudadano estaría a salvo de sus vecinos». John F. Kennedy
Ángel Arribas.
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